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09 de Enero del 2024

Cómo identificar la escoliosis: Guía para detectarla a tiempo

La escoliosis es una afección que afecta a la columna vertebral, provocando curvaturas anormales.
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En muchos casos, las personas no son conscientes de que la padecen hasta que la curvatura se vuelve más pronunciada.

Pero, ¿cómo puedes identificarla a tiempo y qué hacer si la detectas? En este artículo te explicamos los síntomas, cómo identificar la escoliosis en niños y adultos, y qué pasos seguir si crees que tienes esta condición.

¿Qué es la escoliosis y cómo se origina?

La escoliosis es una curvatura anormal de la columna vertebral. Aunque nuestra columna tiene curvaturas naturales, cuando estas son excesivas o se desvían hacia un lado, se considera escoliosis. 

Esta desviación puede ocurrir en cualquier parte de la columna, pero es más común en la zona torácica o lumbar. 

Existen varios tipos de escoliosis, como la idiopática, que se desarrolla sin una causa clara, o la estructural, cuando hay malformaciones en las vértebras.

Síntomas de la escoliosis: ¿Qué señales debes buscar?

Detectar los síntomas de la escoliosis es fundamental para tratarla de manera temprana. Los signos más comunes incluyen:

  • Desviación visible de la columna: Observa si la espalda tiene una curvatura hacia un lado. Esto es más evidente cuando la persona se inclina hacia adelante.
  • Asimetría en los hombros: Si uno de los hombros está más alto que el otro, puede ser un indicio de escoliosis.
  • Dolor de espalda: Aunque no todas las personas con escoliosis sienten dolor, algunas pueden experimentar molestias en la zona lumbar o en el área torácica.
  • Desbalance en la cadera: Si una cadera parece estar más alta que la otra, podría indicar una curvatura de la columna.

Si notas alguno de estos síntomas, es importante consultar a un profesional para un diagnóstico adecuado.

Cómo detectar la escoliosis en niños y adultos

La escoliosis puede aparecer en cualquier etapa de la vida, pero es más común durante la adolescencia, cuando la columna vertebral aún está en desarrollo.

En los niños, la escoliosis puede ser difícil de identificar al principio, ya que a menudo no presentan dolor. Aquí te damos algunos consejos para detectarla:

  • En niños: Realiza el test de Adams, una simple prueba en la que el niño se inclina hacia adelante, de forma que la espalda quede paralela al suelo. Si observas que una parte de la espalda se eleva más que la otra, podría ser un signo de escoliosis.
  • En adultos: Aunque la escoliosis es más común en los niños, también puede desarrollarse en la edad adulta, especialmente por factores de postura incorrecta o envejecimiento. 

Si experimentas dolor crónico o sientes que tu columna está desalineada, es importante consultar a un especialista.

¿Qué hacer si tienes escoliosis?

Si sospechas que tienes escoliosis, lo primero que debes hacer es acudir a un médico. Dependiendo de la gravedad de la curvatura, las opciones de tratamiento pueden variar:

  • Escoliosis leve: Si la curvatura es pequeña (menos de 20 grados), en muchos casos, un estilo de vida activo y ejercicios de fortalecimiento y estiramiento pueden ser suficientes para evitar que la curvatura empeore.
  • Escoliosis moderada: Entre 20 y 40 grados, el uso de un soporte o corsé puede ser recomendado para frenar el avance de la curvatura mientras el cuerpo sigue creciendo, especialmente en adolescentes.
  • Escoliosis grave: Si la curvatura supera los 40 grados, puede ser necesario considerar opciones más invasivas, como la cirugía.

Detecta la escoliosis a tiempo

Identificar la escoliosis a tiempo puede hacer una gran diferencia en el tratamiento y evitar complicaciones futuras. Si eres padre, revisa regularmente la postura de tus hijos y no dudes en consultar a un médico si notas algo irregular. 

En adultos, mantenerse activo, hacer ejercicios de estiramiento y mantener una buena postura son clave para evitar que la escoliosis empeore.

Recuerda que la prevención es fundamental. La detección temprana y el tratamiento adecuado pueden marcar una gran diferencia en la calidad de vida. Si tienes alguna preocupación, no dudes en buscar ayuda profesional.

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